Palabra de honor.

ACB: CAI Zaragoza (59) vs. CB Murcia (60).



Al final hablaron quienes de verdad tenían la palabra, quienes tenían el deber y el privilegio de poder alzar la voz de llar única manera y en el único sitio en que esta tenía validez: En la cancha jugando.

¡Y como hablaron nuestros muchachos en la pista del Zaragoza! Cerrando la boca a todos aquellos que les tildaron de incompetentes, de vagos, de inútiles, de mercenarios.
Deberían de llover no solo congratulaciones y cohetes sino también mensajes de disculpas de los que decían que Marco, ese mismo chico que se reventó vivo para salvarnos y lo logró, era un inútil que no valía para el baloncesto, que Fajardo se paseaba por las pistas y ni corría, que Dean era un cabra loca, que Barnes no se implicaba en el equipo, en fin tantos insultos injustificados que ahora claman contra los que los decían.
Y precisamente el que ha salido rana ha sido el que probablemente era el menos cuestionado hasta la semana pasada, Cris Thomas. De base salvador a villano tridor hay muy poco espacio. No sé que le ha llevado a tirar su carrera en la ACB por la borda, pero como se suele decir y desde la perspectiva de la permanencia, en el pecado lleva la penitencia. A la postre su ruindad ha servido para sacar a la luz a un José Antonio Marco como base solido y una opción de futuro para el club. De hecho es posible que con Thomas no hubiésemos podido ganar hoy.

Y no es porque no estuviese ajustada la cosa: Un punto nos ha dado la salvación, un punto del “cabra loca” de Dean, que se la jugó a fallar y salió bien. Por segunda vez en la liga se gana un final ajustado tras perder al menos tres, aunque el que se ha ganado ha sido el más importante. Ahora como siempre, dan un poco de pena los equipos que descienden pero este juego es así y mejor ellos que nosotros. De dos equipos que jugaban a no perder un partido trabado y defensivo, ganó el que menos fallos cometió y que estuvo casi todo el partido por delante dominando el juego y el marcador. Los nervios, la responsabilidad e incluso la presión del público fue demasiado para un CAI que se perdió a sí mismo y se estrello frente a un CB Murcia conjurado y motivado para mantenerse en la ACB y para distanciarse de la imagen dada por Thomas esta semana.
No sabemos quién quedara el año próximo si el equipo continua, pero creo que Marco, Dean, Robles, Fajardo y Barnes se han ganado el puesto y sobre todo Donatas Slanina que a mi corto entender ha sido el líder de la recuperación de la segunda vuelta, el autentico revulsivo que se enfrentó a todos (incluido Husein) con el objetivo de salvar al equipo y sacarlo de su letargo perdedor. Hombres de palabra y de honor.
Ahora queda mucho camino por recorrer para ser ACB la próxima temporada. Podemos decir que se ha hecho lo fácil, lo que pueden hacer los jugadores con su profesionalidad. Queda que las instituciones, las empresas, los aficionados seamos conscientes del privilegio de tener un equipo en la que posiblemente sea la mejor liga de Europa (Es decir la segunda del mundo) y consigamos que no caiga en los despachos lo que se ha ganado en las pistas.

En fin, vivamos el momento y confiemos en que todo se resuelva y sobre todo: GRACIAS MUCHACHOS.