IM: CB Murcia 95 (63) vs. CB San José (12).
Derrota por KO de nuestros muchachos frente al intratable CB Murcia 95, tal y como se esperaba aunque dando una imagen mucho peor de la que corresponde al potencial real de nuestro equipo.
Salimos arrastrando la baja de Jorge y las lesiones de Adrián, Clares y Liza que aguantaron a duras penas el primer cuarto. Para mas inri los nuestros salieron amedrentados y sufrieron además un pésimo arbitraje, que permitió a los jugadores del CB Murcia hacer todo tipo de faltas personales encontrando la sanción solo cuando se sucedía la tercera o cuarta entrada consecutiva, sobre todo contra jugadores de primer año. Así Raúl y Jesús recibieron una soberana paliza de los bases locales ante la impasividad vergonzosa de los colegiados.
Y lo más grave es que no lo necesitaban ya que fueron superiores en todo momento, pero lejos de la deportividad que debería reinar cuando se juega con un equipo netamente inferior, parece que los entrenadores han imbuido a sus jugadores la necesidad de humillar al contrario, aún a costa de un juego sucio innecesario
Durante el primer cuarto aguantamos cinco minutos pero coincidiendo con la salida de Adrián, resentido por su reciente lesión y con Clares a medio gas, el CB Murcia comenzó a irse rápidamente imponiendo su mejor juego y aprovechando los errores arbitrales.
En el segundo cuarto la lesión de Mario (que brindó unos buenos e intensos momentos) dejó a García como único jugador alto y a pesar de la entrega de este y de Raúl (que aguanto lo inimaginable) y el tesón de Jesús, Tomas y Pina, no pudieron evitar que se rebasase la línea de los 50 puntos de diferencia.
En vista del festival de golpes y empujones al que se habían entregado los jugadores del CB Murcia, nuestro entrenador declinó continuar el partido en una justificada decisión.
Resaltar entre la negativa actitud del contrario, la deportividad mostrada por el emblematico Manu en lo que debería ser un ejemplo para sus compañeros de calidad (que la tienen prácticamente todos) y deportividad. Esperamos que sea fruto de un mal día y no la marca de un equipo que recurra sistemáticamente al juego violento.
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