ACB jornada 4.
CB Murcia (65) vs. Cajasol (59).
Nuestro equipo obtiene una meritoria victoria en su cancha frente a un Cajasol que venia de vencer al Barcelona.
Si la primera mitad del partido vio un cuarto horrendo del Murcia en su primera etapa y una tibia contención en la segunda, un tercer cuarto francamente espectacular, que deja a todo un clásico del baloncesto español en 5 puntos, y un cuarto final bien manejado dieron la victoria a nuestro equipo.
Y fue una merecida victoria a pesar de los porcentajes desesperantes del primer cuarto y de que los aficionados tuvieron el corazón en un puño hasta el final.
Esta claro que nuestro equipo es un equipo de trabajadores, de jugadores competentes pero que carece de grandes tiradores, por lo que en un intercambio ágil, rápido y bonito llevamos las de perder con ña mayoría de los equipos ACB. Y esta carencia de tiro exterior nos lleva a marcarnos una senda, un estilo de juego del que no debemos salirnos si queremos tener buenas opciones de victoria. Esta senda es básicamente la que hace de la defensa su principal virtud, la que juega posesiones elaboradas, la que busca y aprovecha el juego interior y la penetración a canasta para asegurar tantos. Es la senda de los tanteos bajos, la de tirar de mono de trabajo y oficio. Y cuando este domingo condujimos el partido por este camino, enfilamos la senda de la victoria. Así sufriremos pero ganaremos partidos.
Yo digo siempre que el equipo que finalmente gana es el que lleva al otro a jugar su partido. Ya sabemos cual es el nuestro y si conseguimos llevar al contrario a este partido tendremos muchas opciones de llevarnos el gato al agua.
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